Este día se llevó a cabo, en el auditorio de la DDHPO, la firma del Decálogo por un Proceso Electoral Pacífico 2021-2022, en el cual participaron autoridades electorales y partidos políticos. Este acto fue convocado por el Defensor Bernardo Rodríguez Alamilla.
Con la participación del Instituto Estatal Electoral y de Participación Ciudadana de Oaxaca (IEEPCO), el Instituto Nacional Electoral (INE) y el Tribunal Electoral del Estado de Oaxaca (TEEO), así como los representantes de los partidos políticos, se signó el Decálogo que tiene como objeto garantizar una elección en paz el próximo año.
De acuerdo con el titular de la Defensoría, la elección del pasado 6 de junio fue de las más violenta del país, al registrar 88 asesinatos, por ello dijo que es indispensable garantizar una elección segura el próximo año.
El Decálogo se compone de los siguientes puntos:
1.- Coadyuvar en la construcción de un proceso electoral pacífico que tenga como pilares fundamentales los principios de igualdad, no discriminación y diálogo
2.- Refrendar la convicción en el respeto a la igualdad sustantiva entre hombres y mujeres, que permita garantizar la plena participación y el liderazgo de las mujeres en un contexto libre de violencia.
3.- Reafirmar el compromiso de participar en el proceso electoral garantizando el derecho a la información de la sociedad, por medio de campañas libres de denostaciones, discriminación y ataques a la dignidad de las personas participantes.
4.- La vocación como partidos políticos es el servicio público, por ello, sin importar nuestras diferencias, asumimos el compromiso de plantear campañas propositivas que favorezcan el orden público, el interés social y los derechos de la ciudadanía, así como de la sociedad en su conjunto.
5.- Conscientes de que el recurso económico que se destina a las campañas políticas es de carácter público, reafirmamos nuestra voluntad de ejercerlo de manera transparente y con responsabilidad, especialmente en bene cio del derecho de acceso a la información que tiene la ciudadanía.
7.- De que las diferencias no son obstáculo insuperable para, mediante el diálogo libre y razonado, construir acuerdos incluyentes basados en el entendimiento mutuo que nos permitan llevar a cabo un proceso electoral pací co en el que se privilegien los derechos de la ciudadanía.
9.- Asumir la responsabilidad de impedir la intromisión de intereses de grupos de poder fácticos en nuestros institutos políticos, que puedan poner en riesgo el libre ejercicio de la ciudadanía a votar de manera consciente e informada.
10.- Asumir que este Decálogo por un Proceso Electoral Pacífico es un compromiso de todos los organismos políticos involucrados en esta democrática, para lograr la construcción de un gobierno republicano que respete los derechos fundamentales de las personas.


