El día de ayer, una jueza dictó sentencia a las personas involucradas en la desaparación forzada de la activista Claudia Uruchurtu Cruz. La expresidenta de Nochixtlán, Lizbeth Victoria Huerta, e implicada en el caso, recibió una sentencia sólo 4 años y 2 meses; en tanto, su guardia, y autor material, le impusieron una pena de 60 años y 2 personas más recibieron 40 años de prisión por ser partícipes. Familiares de Uruchurto han señaldo que la jueza como el presidente del Tribunal del Poder Judicial del Estado sucumbieron a otros intereses, alejándose de la Justicia y la Verdad.
En un comunicado emitido después de darse a conocer las sentencias, loas familiares de la activista señalan que seguirán persistiendo por la vía jurídica. Dejaron claro que su prioridad es encontrar a Claudia. Además, manifestaron seguir con la lucha que abanderaba la activista, esto es, casos de corrupción en la adminitración municipal de Nochixtlán.
La familia agradece a todas las personas que les han acompañado en este proceso. De igual maenera, reconocen la atención que han recibido por parte del presidente López Obrador y de las autoridades federales.
Aunque no mencionan al gobernador Salomón Jara, es de conocimiento general la buena relación que éste guarda con la expresidenta de Nochixtlán, y que esto tiene relación con la reclasificación del delito, por tanto, la dismución de la pena.